Localidad: Barrio de Muñó

La picota de este pueblo, que se halla en buen estado de conservación, se alza sobre cinco gradas circulares y consiste en una docena de bloques octogonales de toba que terminan en los habituales ganchos. Se remata en un copete de otros dos bloques, el superior troncopiramidal, de ochos lados y muy desgastado. Su base, muy alta, realza la esbeltez de la picota que alcanza los cuatro metros de altura. Esta localidad dependía jurisdiccionalmente del Monasterio de Las Huelgas.